Viajes realistas para visitas a domicilio en ensayos clínicos
Las visitas domiciliarias para los ensayos clínicos descentralizados (ECA) en América Latina son diferentes que en EE.UU. o Europa. Esta imagen fue tomada recientemente por una enfermera que visitaba un hogar rural en Brasil. La carretera no está asfaltada. Las condiciones meteorológicas son duras. Y, sin embargo, cuando se solicita a H Clinical que cotice visitas a domicilio para pacientes con enfermedades raras, cáncer y otras dolencias, se nos pide sistemáticamente que los desplazamientos se limiten a una hora ida y vuelta. He aquí algunos datos importantes que todo el mundo debería conocer sobre los ensayos clínicos directos al paciente y las visitas a domicilio en LATAM.
Ubicaciones geográficas diversas
Según McKinsey, el 70% de los participantes en ensayos viven a más de dos horas de los centros de investigación. En América Latina, dos horas pueden llevar tres, teniendo en cuenta la seguridad de las condiciones. Los retos socioeconómicos y la falta de infraestructuras de transporte dificultan exponencialmente los desplazamientos de los pacientes a los centros de investigación tradicionales y de las enfermeras a las visitas domiciliarias, especialmente en las zonas más rurales. Incluso para los participantes que viven en zonas urbanas, donde reside el 80% de la población, el tráfico en algunas de las ciudades más pobladas del mundo puede ser increíblemente difícil.
Carreteras en mal estado
El estado de las carreteras, la falta de calles claramente señalizadas y, en algunos casos, la ausencia de direcciones visibles crean mayores dificultades al viajar de las zonas urbanas a las rurales. Y cuando las inclemencias del tiempo se unen a un estado deficiente de las carreteras, sobre todo en las zonas rurales, el factor de dificultad aumenta la probabilidad de retrasos. Como ilustra la imagen, encontrar el destino no es tan fácil como parece en una hoja de cálculo.
Accesibilidad limitada del transporte
En 2021, el número de vehículos per cápita en esta región era de aproximadamente 0,22, es decir, 220 por cada 1.000. Europa (0,52) y Norteamérica (0,71) duplicaban o triplicaban esa cifra, respectivamente. El transporte fiable es un privilegio. La mayoría de las enfermeras, urbanas o rurales, no tienen coche. Y el transporte público es limitado e inviable a la hora de transportar equipos médicos. Es necesario compartir coche o taxi, o bien organizar el viaje.
El punto de vista clínico de H
¿Centrarse en el paciente es el objetivo común de la investigación clínica? Si es así, las visitas a domicilio responden a los deseos y necesidades de los pacientes, brindan la oportunidad de atender a poblaciones de pacientes diversas y optimizan la captación, inscripción y retención de pacientes. Sin embargo, las estimaciones de los tiempos de viaje -para que las enfermeras lleguen, entren, salgan y se pongan en camino- deben ser realistas. El contexto de las situaciones regional y local debe impulsar estimaciones razonables del tiempo de viaje.